México.- San Antonio de Padua, conocido como el santo del amor y de las cosas perdidas, fue un hombre nacido en Portugal el año de 1195. San Antonio fue un padre franciscano que dedicó su vida a la fe católica, predicando en Europa y ayudando a los necesitados. El santo fue canonizado el 13 de junio de 1233 por los milagros que había llegado a realizar.
El santo es conocido como el patrón de los objetos perdidos, protector de los pobres y a quien se recurre para encontrar pareja. Cada 13 de junio se conmemora al santo y se aprovechan estas fechas para pedirle, principalmente por causas amorosas, poniendo al santo de cabeza para que se cumplan las peticiones.
La tradición de colocarlo de cabeza viene de una leyenda popular. Se relata que una mujer, en su desesperación por encontrar pareja, acudió al santo en busca de ayuda, mientras la mujer rezaba se le apareció el santo de cabeza quien le indicó que acudiera en su nombre a buscar una persona que le proporcionaría dinero. La mujer siguió sus instrucciones y fue donde el hombre quien le dió el dinero lo que le permitió casarse.
Este acontecimiento hizo que las personas comenzaran a crear una tradición en torno a la fe que consiste en poner al santo de cabeza y hacer una petición generalmente relacionada a encontrar el amor, cuando este se encuentra se devuelve al santo a su posición como seña de agradecimiento. Otra variante es la de esconder al niño que lleva la imagen del santo y devolverla cuando se encuentra a la persona deseada.