Fotografía/Pixabay
Alemania. – Los funcionarios de la Agencia Estatal de Medioambiente de Lanuv en Alemania observaron un extraño comportamiento en el salmón atlántico hace más de un año, en junio de 2020. Los peces, criados en un proyecto de conservación de especies, intentaban salir del agua.
De acuerdo a Daniel Fey, jefe del departamento de Ecología de Pesca y Acuicultura, se debía a que querían evitar el agua instintivamente, debido a un grado de contaminación en la misma. Pero al siguiente día los salmones volvieron a tomar un comportamiento absolutamente normal.
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Al llevar a cabo un análisis de las aguas, encontraron varias sustancias químicas que explicarían dicha contaminación: pesticidas y productos farmacéuticos en pequeñas cantidades, y dos, concretamente, en mayor cantidad: cocaína y benzoilecgonina, producto que se utiliza para diluir la sustancia anterior.
No se encontró cocaína en la pecera de los salmones, pero se explica dado el alto grado de dilución de esta sustancia en el agua.
Salmon frantically jumping around on a fish farm in Germany may have been on cocaine, according to a report released by German environmental officials. https://t.co/owm5JJEg0j
— VICE TV (@VICETV) July 17, 2021
Debido al hallazgo inusual, los funcionarios investigaron el arroyo y encontraron una descarga ilegal de aguas residuales. En ciertas partes de Europa, es común que bancas de narcotraficantes arrojen vertidos y desechos tóxicos en arroyos y ríos locales. La Policía investiga el caso, pero se desconoce el responsable de este vertido, ya que es difícil descubrir el origen cuando el desechos son arrojados al agua.
Fuente Antena 3.