Rusia. – La madrugada del viernes, Rusia lanzó un ataque aéreo a gran escala contra Kyiv y otras regiones de Ucrania, utilizando más de 400 drones, misiles de crucero y misiles balísticos, según confirmaron autoridades ucranianas y rusas. Al menos tres personas murieron y 49 resultaron heridas, informó el presidente Volodímir Zelenski, aunque el alcalde de Kyiv reportó inicialmente cuatro fallecidos.
Los ataques afectaron gravemente la capital, Kyiv, así como las ciudades de Lutsk y la región de Ternópil, donde se reportaron daños a viviendas, escuelas e infraestructura gubernamental. En total, se lanzaron 407 drones, 38 misiles de crucero y seis misiles balísticos, y Ucrania afirmó haber interceptado más de 200 drones y hasta 30 misiles.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró que el ataque era una respuesta a acciones “terroristas” del régimen de Kyiv, afirmando que los blancos eran instalaciones militares. El operativo se produce días después de la “Operación Telaraña”, en la que Ucrania atacó con drones al menos cuatro bases aéreas rusas, dañando más de 30% de sus portamisiles estratégicos.
Durante el ataque, decenas de miles de civiles buscaron refugio en estaciones subterráneas mientras se oían explosiones y ráfagas antiaéreas. Kyiv sufrió interrupciones en su red de metro, y los residentes describieron horas de tensión bajo el constante zumbido de drones.
Zelensky pidió a EE.UU., Europa y la comunidad internacional aumentar la presión sobre Rusia, advirtiendo que no hacerlo equivale a permitir más muertes.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso afirmó que sus defensas derribaron 174 drones ucranianos en diversas zonas, incluidas Crimea y el Mar Negro. Las recientes negociaciones de paz entre ambos países en Estambul no tuvieron avances, y Moscú ha advertido que la respuesta militar seguirá intensificándose.