Fotografía/ Consumer- Faro Informa
México.- La dosis de Moderna fue la primera autorizada en Estados Unidos, por lo que sus efectos secundarios ya han sido observados; más allá de la fiebre o dolor de cabeza que la mayoría de las vacunas existentes podrían provocar, existe uno particularmente asociado al activo de Moderna: ‘el brazo COVID’.
Un estudio publicado en la revista científica Jama Network describe a este síntoma como una “reacción de hipersensibilidad retardada”. Básicamente es una reacción cutánea que endurece los tejidos y puede causar dolor en el brazo donde se inyectó el activo.
“Estas reacciones ocurrieron en o cerca del lugar de la inyección y se describen como placas rosadas, pruriginosas, dolorosas y edematosas”, apunta el artículo.
El texto publicado es el resultado de un estudio hecho a 16 pacientes que recibieron la vacuna de Moderna. Del total de participantes 15 tuvieron alguna reacción en la piel con la primera dosis, para la segunda dosis el número bajó a 11.
El estudio advierte que esta serie de casos fue de un solo centro durante un corto período de tiempo. La mayoría de los pacientes eran trabajadores sanitarios, lo que puede limitar la generalización.