Estados Unidos.- Una mujer fue acusada de homicidio en primer grado luego de que un loro la acusara de haber asesinado a su marido. Al parecer el animalito presenció el momento en que la mujer mató a su esposo y escucho las últimas palabras de su dueño.
“¡Don’t fucking shoot!” (¡no dispares, maldita sea!)”, fue la frase que pronunciaba una y otra vez el ave luego del asesinato. El hombre recibió cinco disparos en mayo de 2015 y las sospechas apuntaban a Glenna Duram.
LA mujer intento suicidarse, pero no le resultó. El Loro paso a manos de la ex esposa del hombre muerto, por lo que fue ella quien reveló la frase que repetía la mascota.
Fuente: Infobae