El médico José Manuel Mireles Valverde, fue detenido por fuerzas federales este viernes 27 de junio, justo horas después de haber movilizado un grupo de autodefensas al municipio de Lázaro Cárdenas, particularmente La Mira, la presunción en su contra uso de armas de fuego exclusivas del Ejército.
Mireles ya había tenido un desacuerdo con el gobierno federal, el primero sucedió en la recuperación del avionetazo a principios de este año, cuando en entrevista con la periodista Carmen Aristegui, indicó que preferían morir antes de que los desarmaran, esto además de ser bastante claridoso al referirse que el gobierno le hizo leer un mensaje que distorsionó Televisa, en cual invitaba a sus compañeros autodefensas a desarmarse y actuar en legalidad.
Acto seguido el mismo gobierno federal a través del comisionado Alfredo Castillo nombra en su lugar a Estanislao Beltrán Torres “Papá Pitufo” como vocero general de las autodefensas, esto con la premisa de que el líder emblemático de las autodefensas se encontraba en un proceso de recuperación, dicho por el nuevo vocero, Mireles no se encontraba apto para estar dando información porque estaba fuera de la realidad.
De ahí con un Mireles fuera de la jugada, la misma vocería la controló por varios meses por el Papá Pitufo, este último invitaba a los autodefensas y líderes del movimiento a ir por legalidad, de ahí se desprende la firma del Concejo de Autodefensas entre gobierno federal y de Michoacán
Ese fue el momento que dividió a los grupos de autodefensas, de ahí para delante se trataba de dos frentes distintos de las autodefensas, unos que estaban con el gobierno federal, estos atendían las órdenes del comisionado Castillo a través del Papá Pitufo y otros que desde el principio mostraron su descontento con el actuar de las autoridades como la complicidad de las mismas, aquí entra el doctor Mireles en un frente con decisión propia.
Este acto de discordancia con el gobierno federal en particular con el comisionado Castillo frustró el trabajo que se realizaba en el estado, además de volverse incomodo por los comentarios tan abiertos en diferentes medios nacionales e internacionales, entre ellos no tenemos confianza en el Gobierno Federal, me han traicionado, no hay nada de comunicación, aseguró el líder de los Autodefensas, y calificó al Comisionado Alfredo Castillo como “traidor”.
Este sábado se prepara lo que será su calvario, pues ya fue puesto a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR), mientras tanto en las próximas horas se definirá su situación legal, cabe destacar que el armamento de uso del ejército es bastante castigado y más por tratarse de todo un grupo, es decir los 82 que acompañaban al líder de las autodefensas de Tepalcatepec.
La Ley federal de Armas de Fuego y Explosivos señala en su artículo 83 al que sin el permiso correspondiente porte un arma de uso exclusivo del Ejército, Armada o Fuerza Aérea, se le sancionará, según lo indicado en el apartado III con prisión de cuatro a quince años y de cien a quinientos días multa, cuando se trate de cualquiera de las otras armas comprendidas en el artículo 11 de esta Ley. En caso de que se porten dos o más armas, la pena correspondiente se aumentará hasta en dos terceras partes.
También indica que cuando tres o más personas, integrantes de un grupo, porten armas de las comprendidas en la fracción III del presente artículo, la pena correspondiente a cada una de ellas se aumentará al doble.
Esto es lo que le espera a Mireles, será la decisión de un juez y de los cargos que le imputen dependiendo del tipo de armas que según los verdaderos autodefensas portaban durante su detención.
