Estados Unidos. – Pablo Orejel y Marco Antonio Calles, ambos originarios de Michoacán, México, sorprendieron a California con una propuesta poco común, una tortillería móvil. El proyecto, que iniciaron en marzo de este año, busca llevar el sabor auténtico de las tortillas mexicanas a quienes viven lejos de su país.
“Tratamos de traer un pedacito de México para aquí, para California”, comentó Marco Antonio en entrevista, emocionado por la respuesta del público pues, para muchos de sus clientes, esta tortillería móvil es una manera de reconectar con sus raíces.
La tortillería se distingue por usar una máquina traída desde México y una receta que combina cuatro tipos de masa, además “se hacen todos los días, sin conservadores, no embolsamos ni dejamos nada para el día siguiente”, explicó Marco Antonio. Por lo que, los clientes, satisfechos con el sabor, suelen comentar que las tortillas les recuerdan a las de su tierra natal.
Con el éxito que han tenido en el sur del Valle Central, Pablo y Marco esperan expandir su mercado en Los Ángeles. “Nuestro mayor orgullo es todo lo que hemos luchado para abrir este negocio”, concluyó Pablo, enfocado en nuevos desafíos y metas a futuro.