Guerrero, 14 julio 2015.- Con un grupo de mariachis y más de mil 500 personas es como se le está dando el último adiós a Joan Sebastian, quien es velado en su rancho Cruz Grande.
Amigos, familiares y fanáticos del “Rey del Jaripeo” son parte de la ceremonia que oficia un sacerdote, el cual guía los rezos católicos que se le están ofreciendo al cuerpo del cantante.
“Las puertas están abiertas para la gente que un día se guardó su quincena para comprar un disco de mi hermano, y para quienes lo quisieron.