Por Redacción Monitor Expresso
Río de Janeiro Brasil, 22 de agosto del 2016.- Luego de que el maratonista Feyisa Lilesa protestó en los Juegos Olímpicos de Río 2016 contra la política de Adís Abeba, el gobierno etíope aseguró que el deportista, no va a ser acosado ni perseguido cuando regrese a su país.
El domingo por la mañana, el maratonista, cruzó la meta con los brazos en alto como si estuviera esposado, en señal de protesta contra las políticas represivas del gobierno del país africano contra el pueblo oromo.
Durante la ceremonia de premiación, volvió a repetir el gesto y declaró luego, en conferencia de prensa, que temía regresar a su país después de su acto de protesta “contra la actitud del gobierno hacia los oromo”, una de las dos principales etnias del país, que representan casi el 60% de la población, de la que Lilesa forma parte.
“Lilesa no se va a encontrar con ningún problema por su posición política”, aseguró este lunes el vocero del gobierno, Getachew Reda, citado por Fana. “Más allá de que sea imposible expresar un punto de vista político durante los Juegos Olímpicos, el atleta va a ser bien recibido en casa, al igual que el resto de los miembros del equipo olímpico etíope”, añadió la fuente.
Fuente: El ciudadano