Fotografía/ Los Ángeles Times
El Intervencionismo parece ser una de las últimas esperanzas que barajea la Oposición Política al Proyecto de la Cuarta Transformación, misma que en las últimas semanas ha demostrado un sin número de razones por las cuales fue calificada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador como moralmente derrotada. De tal manera que la oposición ha apuntado hacia apuntalar el proyecto político del demócrata americano Joe Biden en una suerte de que este siendo electo como Presidente de los Estados Unidos de América pueda dirigir sus esfuerzos hacia una posible revancha en contra de Andrés Manuel López Obrador.
Cabe destacar por ejemplo la postura por el cual, la oposición quería lograr de alguna manera que el presidente Andrés Manuel López Obrador tomará un lado en la contienda, del lado de Trump insisten ellos, para que, terminadas las elecciones, se encuentren ellos en el lado ganador y el presidente en el lado perdedor que sufrirá el desquite de Biden.
Si bien la mayoría de la oposición usa argumentos que van en contra del actual presidente Donald Trump por su discurso de odio, su homofobia, su racismo y xenofobia, parece que los llamados que se hacen en contra de Trump no es para que llegue un salvador demócrata a la Casa Blanca, sino para que llegue un salvador de sus intereses aquí en México. Teóricamente, los gobiernos de los demócratas representan un lado más humano con sus vecinos del sur, nosotros, o eso dicen en sus discursos ya que en los hechos han sido los presidentes demócratas quienes más deportaciones han realizado hacia México.
También se refieren al respeto por parte del presidente de los Estados Unidos a nuestro País, el cual parece no tenerlo, así como Barack Obama no lo tenía por Enrique Peña Nieto y como Bush no lo tenía por Vicente Fox, lo cual no distingue ideologías del bipartidismo americano. En las elecciones norteamericanas, los mexicanos siempre nos preguntamos ¿con cuál candidato de los dos partidos nos iría mejor? Tal vez, aquel que no nos quiera pisotear tanto y que renuncie casi al papel hegemónico de su país que tiene en la región y en el mundo, aunque conozcamos de antemano que eso no pasará casi en ningún escenario.
La verdad sea dicha, es que de esa manera podemos ver realmente el interés de la oposición por apuntalar a Biden, no tanto por lo que haga o deje de hacer, mucho menos porque se sientan demócratas en contra de las facetas lunáticas de Trump, sino más bien por el tipo de intereses que ellos creen que velará, es decir los suyos, dejándonos claro que su única intención con Biden es la del intervencionismo.
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Al último, el mismo embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau comentó ante la insistencia de los opinólogos de derecha que la relación de la unión americana sería amistosa con el gobierno de México sin importar los resultados, pero eso a los opositores no les importa, ellos quieren InterBidencionismo.