Hablar de mil cosas y no resolver los problemas actuales es la retórica engañosa del mesías. Enero y febrero han sido los dos meses más violentos en décadas, para el Orator no existe la necesidad de atacar al crimen organizado; en verdad ni tiene con qué hacerlo. Las policías federales y estatales no son fiables, están infiltradas y corrompidas por los criminales.
La famosa guardia nacional NO EXISTE, tardará por lo menos cinco años en constituírse; ¿Y mientras? como dijo el Pastor Evangeliae: “Se dejará de perseguir a los narcos”. Y en consecuencia que los delincuentes hagan lo que quieran.
LA SEGURIDAD DE LOS CIUDADANOS YA NO ES UNA PRIORIDAD MORENAICA.
Del mismo modo se cierran las guarderías y no se propone nada serio en su sustitución; lo de dar el dinero a los abuelos para que cuiden a sus nietos, es una vacilada.
Pareciera que el pueblo sabio es el que calla, alaba, ovaciona y maldice a cuanto “fifí” se le figura que ataca al Pater Patriae IV.
Si los problemas se ignoran y se prometen soluciones sólo a futuro, pronto llegará el presente con su devastadora e inmisericorde realidad.
Sin aeropuerto, sin guarderías, sin oír los reclamos de los pueblos contra la termoeléctrica y a los mayas en desacuerdo con EL TREN MAYA, ¡Vaya!!!
LA VIOLENCIA EN LA TIERRA CALIENTE DEL VALLE DE APATZINGÁN CRECE IRREMEDIABLEMENTE.