México. – Las presiones inflacionarias han comenzado a ceder en México, con la inflación anual moderándose al 4.58 por ciento en septiembre, desde el 4.99 por ciento registrado en agosto, según el INEGI. Este dato superó las expectativas de analistas, que estimaban una inflación del 4.62 por ciento.
La desaceleración se atribuye a una reducción en las presiones tanto de la inflación subyacente (3.91 por ciento anual) como de la no subyacente (6.50 por ciento anual). En términos mensuales, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un incremento de solo 0.05 por ciento, el más bajo registrado para un mes de septiembre, mejor que el 0.09 por ciento pronosticado.
El director para América Latina de Moody’s Analytics, Alfredo Coutiño, comentó que estos resultados podrían favorecer un nuevo recorte de tasas en noviembre por parte de Banxico. En la inflación subyacente, las mercancías mostraron un incremento anual de 2.92 por ciento, la cifra más baja desde enero de 2006, mientras que los servicios alcanzaron un 5.10 por ciento.
En la inflación no subyacente, los precios agropecuarios se moderaron a 6.76 por ciento anual, gracias a un enfriamiento en los precios de frutas y verduras. Sin embargo, los energéticos registraron una inflación de 6.01 por ciento anual, con tarifas autorizadas por el gobierno aumentando a 3.93 por ciento.
Entre los productos con mayor variación mensual, el limón y la papaya destacaron con incrementos del 22.23 por ciento y 15.28 por ciento, respectivamente, mientras que la naranja y el chayote cayeron un 20.90 por ciento cada uno.