Israel – Irán. – En la madrugada del viernes, Israel ejecutó una ofensiva aérea de gran escala contra instalaciones nucleares y objetivos militares clave en Irán, como parte de la llamada Operación León Naciente. El ejército israelí (FDI) calificó la acción como “preventiva, precisa y combinada”, alegando que busca neutralizar amenazas nucleares crecientes desde Teherán.
El ataque —coordinado con el Mossad— causó al menos 78 muertos y más de 200 heridos, según medios iraníes. Entre las víctimas estarían altos mandos iraníes, científicos nucleares y el jefe de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salami.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que la operación continuará “durante los días que sean necesarios”, mientras que Irán respondió con el lanzamiento de drones y acusó a EE.UU. de complicidad, aunque Washington negó participación directa.
Esta escalada representa el mayor enfrentamiento directo entre ambos países en décadas, elevando el riesgo de una guerra regional y poniendo en pausa las conversaciones nucleares entre Irán y EE.UU.