MonitorExpresso.com
Sin resultados
Ver todos los resutlados
  • Portada
  • Destacadas
  • Reportajes
  • Columnistas
  • México
  • Internacional
  • Michoacán
  • Jalisco
  • Más
    • Ciencia y Tecnología
    • Deportes
      • Educación
      • Espectáculos
      • Finanzas
    • Morelia
    • Mundo Raro
      • Política
      • Salud
    • Seguridad
MonitorExpresso.com
Sin resultados
Ver todos los resutlados
MonitorExpresso.com

Soy guadalupano, y què! – La Opinión del Padre José Luis Segura Barragán

por Redacción ME
18 agosto, 2016
en Columnistas
A A
Soy guadalupano, y què! – La Opinión del Padre José Luis Segura Barragán
Compartir en FacebookCompartir en Twitter/XCompartir en WhatsApp

Por Padre José Luis Segura Barragán

El catolicismo en México no ha producido ninguna obra relevante de teología, moral o mística. Es un catolicismo de infantes en la fe y de crédulos en la vida cotidiana, bregando en la ignorancia, la superstición y el fanatismo inofensivo de los dimes y diretes.

Los santos en México son sólo mártires, porque para morir los mexicanos nos pintamos solos. Pero para pensar, profundizar y vivir el cristianismo en su prístina exigencia total, no le tenemos ni un ápice de voluntad.

También te puede interesar

El Papa Francisco pide que se reduzca el tiempo de los sermones

San Antonio de Padua: ¿Por qué lo ponen de cabeza?

Desde los tiempos del Virrey de Linares, a mediados del siglo XVIII en una instrucción a su sucesor, “en este reino les parece a los más que en trayendo el rosario al cuello ya son católicos… que los diez mandamientos no sé si los conmutan por ceremonias.” les advertía de la pobreza de la fe de los novohispanos.

Pareciera que los clérigos mexicanos siempre han sentido más inclinación por los temas políticos que por los religiosos o pastorales. Los jesuitas expulsados por los borbones de la Nueva España en la década de 1760, ya manifestaban su amor a la patria mexicana, a la vez que denotan sus intereses intelectuales, ninguno teológico, moral o pastoral. Landívar, con su Rusticatio Mexicana; Clavijero, con su Historia Antigua de México; Alegre, traductor de Homero; y Fábrega, intérprete del Códice Borgiano.

¿Qué requieren del sacerdote los católicos, de ayer y de hoy?

Que no se meta en política, que atienda sus deberes desde la sacristía y que esté disponible día y noche para celebrar bautismos, matrimonios y exequias. Es todo. Y que jamás toque temas sociales o políticos en sus prédicas.

En las grandes ciudades el sacerdote no se puede dar a basto en la infinidad de ceremonias que se le piden, ¿qué tiempo tendrá para reflexionar sobre los misterios de la fe? ¿O qué interés tendría en leer a Los Santos Padres de La Iglesia, los doctores, los teólogos o los escrituristas? Nunca se ha producido en México una obra de religión de valía universal, o de alguna originalidad. Las universidades católicas y no se diga los seminarios mayores, sólo son repetidores timoratos de las doctrinas tradicionales y de los documentos de la Santa Sede. La teología de la liberación no cuajó en México, más bien el lefevrismo consiguió muchos seguidores vergonzantes y disimulados.

¿A qué se debe esta esterilidad intelectual y teológica en el clero y laicafo mexicanos? En los laicos pronto se encuentra la respuesta, carecemos de intelectuales catòlicos, hay muy pocos y no han sido promocionados.

Los santos de las persecuciones religiosas, como la guerra cristera, son los que han demostrado que vale la pena morir por su fe: “¡Viva Cristo Rey!” el catolicismo en México se sustenta en dos grandes pilares, en la devoción cuasi idolátrica en la Virgen de Guadalupe y en el culto a los muertos. El guadalupanismo y nigrodulismo, el culto a los muertos, es lo más fuerte en la vida de los cristianos mexicanos, tanto de los urbanos como los del campo. El mexicano pude llegar a dar la vida por Cristo, pero es muy difícil que viva de acuerdo a la doctrina cristiana. El sincretismo mexicano es uno de los más convenientes para vivir con varias creencias al mismo tiempo, y sin ninguna ruptura o remordimiento de conciencia. Se va con los brujos, cuando las oraciones de sanación católicas han fallado, o cuando ni Dios o los santos han querido hacer el milagro.

Vasconcelos tenía fe en que el mestizaje del mexicano daría al mundo la raza cósmica, algunos creemos que El Espíritu Santo suscitará en la Iglesia Mexicana santos y sabios ministros, cuyo único anhelo será servir a Dios, “con toda el alma, con todo el corazón, con toda su mente y con todo su ser.”

 

Etiquetas: José Luis Segura BarragánReligión

Redacción ME

Notas relacionadas

Somos nuestra memoria: Determinantes sociales y comerciales de la salud mental –  La Opinión de Boris González Ceja
Columnistas

Somos nuestra memoria: Determinantes sociales y comerciales de la salud mental – La Opinión de Boris González Ceja

12 abril, 2025
Enero 2025 y nada cambió en Michoacán: Sergio Cortés Eslava
Seguridad

Enero 2025 y nada cambió en Michoacán: Sergio Cortés Eslava

4 febrero, 2025
Bedolla aprueba su “referéndum” y le cumple a la 4T – La Opinión de Carlos F. Márquez
Columnistas

Bedolla aprueba su “referéndum” y le cumple a la 4T – La Opinión de Carlos F. Márquez

3 junio, 2024


 

 

 

  • Portada
  • Directorio
  • Nosotros
  • Políticas

© Monitor Expresso.

Sin resultados
Ver todos los resutlados
  • Portada
  • Destacadas
  • Reportajes
  • Columnistas
  • México
  • Internacional
  • Michoacán
  • Jalisco
  • Más
    • Ciencia y Tecnología
    • Deportes
      • Educación
      • Espectáculos
      • Finanzas
    • Morelia
    • Mundo Raro
      • Política
      • Salud
    • Seguridad

© Monitor Expresso.