Fotografía/Cuatro
Mundo.- El mar de Aral se seca y su muerte está cada vez más cerca. Lo demuestra una vista del satélite Proba-V de la ESA que muestra todo lo que queda del que una vez fue el cuarto lago más grande del mundo y hoy escenario de un grave desastre ecológico.
El mar de Aral fue una vez un gran lago encerrado entre Kazajstán en el norte y Uzbekistán en el sur, con un área de 68.000 kilómetros cuadrados, el doble que Bélgica.
Sin embargo, el mar de Aral se ha reducido dramáticamente desde la década de 1960, cuando los proyectos de irrigación soviéticos desviaron el agua de los ríos que lo abastecían. Para la década de 2000, el lago se había reducido a aproximadamente el 10% de su tamaño original y en 2014 el Lago del Sur con forma de herradura prácticamente se había secado.