Por Redacción Expresso
Libia a 01 de junio de 2016.- La fotografía de un bebé cuyo cuerpo sin vida fue recogido en el Mediterráneo por una ONG alemana tras volcar la barcaza procedente de Libia en la que viajaban 350 personas, da la vuelta al mundo y Europa vuelve a afrontar en toda su crudeza la tragedia humanitaria a la que cada día de enfrentan cientos de migrantes y refugiados.
La ONG Sea-Watch encontró el cadáver flotando en el agua la semana pasada después de que el naufragio se hundierA; Desconocen su edad, aparenta un mes, según AFP, su nombre y su sexo, y tampoco saben si sus padres se cuentan entre los 45 fallecidos o entre los 135 rescatados del suceso. La Marina Militar italiana se ha hecho cargo del cuerpo y de la tarea de buscar familiares entre los supervivientes.
En la imagen se ve al bebé con los ojos cerrados y los labios teñidos de azul en los brazos de un miembro de la ONG. “Si no queremos ver cosas así, tenemos que dejar de provocarlas”, señala Sea-Watch en un comunicado que ha difundido junto a la foto.
El voluntario que sostiene al bebé fallecido es Martin (prefiere no dar a conocer su apellido), un terapeuta musical padre de tres niños que explica que avistó el cuerpo en el agua “como un muñeco, con los brazos extendidos“.
“Lo cogí del antebrazo y lo apreté contra mí como si estuviera vivo… Extendió los brazos hacia delante con sus pequeños dedos en el aire, y el sol le dio de lleno en sus ojos, brillantes y amables pero vacíos. Empecé a canturrear para consolarme y para dar salida a mi incomprensión, al desgarro emocional que sentía. Sólo seis horas antes, ese niño estaba vivo”.
Fuente: huffingtonpost






