Mundo. – La FIFA ha anunciado que destinará 50 millones de dólares del fondo de legado del Mundial de Qatar 2022 a diversas organizaciones internacionales para el desarrollo de programas sociales. Los fondos serán repartidos entre la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
En colaboración con la OMS, la FIFA apoyará la iniciativa “Beat the Heat”, que busca proteger a los trabajadores expuestos a temperaturas extremas y afectados por el cambio climático. Con la OMC, se respaldará el Fondo de Mujeres Exportadoras en la Economía Digital, un programa que proporciona subvenciones y asistencia técnica a mujeres para aprovechar las oportunidades del comercio internacional y la economía digital. Finalmente, con ACNUR, la FIFA financiará programas de apoyo a los refugiados de Oriente Medio y el Norte de África.
El fondo también incluye una colaboración con la Aspire Academy y el Programa de Desarrollo del Talento de la FIFA, dirigido por Arsène Wenger, para identificar jóvenes talentos en zonas remotas de países en desarrollo.
Este anuncio forma parte de la estrategia de la FIFA tras el Mundial de Qatar 2022, que reportó un beneficio bruto de casi 5.800 millones de dólares, según su informe financiero de 2022.
Sin embargo, la iniciativa ha generado críticas, especialmente de Amnistía Internacional. Steve Cockburn, jefe de derechos laborales y deporte de la organización, calificó de “vergonzoso” que el fondo no reconozca la explotación de trabajadores migrantes que trabajaron en la construcción de infraestructuras para el Mundial, muchos de los cuales perdieron la vida en condiciones laborales extremas. Amnistía Internacional exigió que la FIFA ofreciera reparaciones significativas a las víctimas de abusos laborales en lugar de lanzar este fondo sin asumir responsabilidades.