Morelia, Michoacán.- José Ramón, Andrés Manuel y Gonzalo Alfonso López Beltrán, hijos del presidente, Andrés Manuel López Obrador, se encuentran en la mira pública porque en menos de tres años se convirtieron en empresarios de rubros como la chocolatería y cervecería.
En diciembre pasado, los hijos del presidente lanzaron un par de bebidas nuevas, una de ellas alcohólica lo que armó revuelo entre el gremio cervecero por tratarse de una cerveza ámbar y un refresco, ambos fabricados a base del cacao que se produce en Finca Rocío.
Finca Rocío se ubica en el municipio de Teapa, Tabasco, propiedad de los tres hijos de AMLO y que les fue heredada por su madre Rocío Beltrán Medina, primera esposa (ya fallecida) del presidente.
Este también es el nombre principal de la empresa que apenas fue fundada en 2019 y de la cual hasta el momento hay dos productos que elabora, cervezas, cuya planta está en la propia finca y ahora una chocolatería que abrió sus puertas en la calle República de Guatemala, en el centro de la Ciudad de México el pasado 8 de septiembre.
Hace más de un año, los hijos del presidente se desempeñaban ya sea como asesores políticos o freelancers en materia de mercadotecnia y publicidad, sin embargo ninguno de estos trabajos eran fijos.
Esto ha levantado polémica, pues en menos de un año los hijos del presidente lograron hacer una empresa que tiene futuro, primero porque la planta de cerveza de Tabasco cuenta con toda la maquinaria para producir en masa más de 100 mil litros por mes, cantidad casi similar a la que tienen las grandes empresas del reamo como Cuauhtémoc Moctezuma.
En el caso de los chocolates, la empresa ofrece chocolatería gourmet e incluso la jefa de gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum Pardo acudió a la inauguración del negocio.