Estados Unidos.- El bombero Kendall James Murphy y su novia Jessica Padgett se casarían el 29 de septiembre, la ceremonia no se logró: él, falleció en un accidente automovilístico.
La mujer decidió usar su vestido de novia ese día e ir a visitar la tumba de quien fuera su prometido. Incluso, fue fotografiada por el hombre que ya habían contratado para la fecha.
El fotógrafo escribió: ‘Ella hizo que la mirada rota se viera hermosa y fuerte invencible. Caminó con el Universo sobre sus hombros y lo hizo parecer un par de alas.
Jessica estuvo acompañada de sus familiares y amigos. A su lado estuvieron quien sería su dama de honor y el mejor amigo de Kendall, quienes pronunciaron discursos ante la tumba.
Kendall fue descrito por la Asociación Nacional de Bomberos Caídos como un “hombre de Dios desinteresado que amaba pasar tiempo con su familia y amigos. Tenía un verdadero corazón de servicio y una personalidad cautivadora que iluminaría cualquier habitación”.
Kendall murió a los 27 años en un accidente automovilístico, mientras trabajaba. Presuntamente, el responsable manejaba bajo los influjos del alcohol.
Con información de: Metro