México. – A un mes de la muerte de Paloma Nicole, adolescente de 14 años que perdió la vida tras someterse a una cirugía estética sin consentimiento de su padre, el Congreso de Durango aprobó por unanimidad la llamada Ley Nicole, una reforma que prohíbe procedimientos estéticos invasivos en menores de edad.
Carlos Said Arellano, padre de la joven, consideró la medida un avance necesario, aunque dolorosamente tardío para su hija. Mientras enfrenta un duelo que describe como “un naufragio emocional”, recibe apoyo psicológico, espiritual y comunitario, pero mantiene como prioridad que se haga justicia.
La reforma, impulsada por la diputada Gabriela Vázquez Chacón, establece que ningún menor podrá someterse a cirugías estéticas, aun con consentimiento de los padres, hasta concluir su desarrollo físico. También introduce responsabilidad penal para clínicas, consultorios, hospitales y arrendadores que permitan intervenciones irregulares.
El caso que detonó la reforma sigue su curso legal. La madre de Paloma y su padrastro —presunto cirujano— fueron vinculados a proceso tras ser detenidos por su presunta participación en la operación clandestina. La Fiscalía de Durango cuenta con tres meses para cerrar la investigación.
La muerte de Paloma expuso vacíos legales y fallas de supervisión sanitaria, además de la influencia de redes sociales y presiones estéticas sobre menores. Legisladores y activistas consideran que la nueva ley busca prevenir que tragedias como ésta se repitan y proteger a adolescentes frente a riesgos médicos y sociales.
Para su padre, la Ley Nicole es el legado más doloroso: llega tarde para Paloma, pero podría evitar que otras familias enfrenten la misma tragedia.









