Morelia, Michoacán 3 de noviembre de 2023.- La cuestión de género está muy presente en la sociedad, en la forma de actuar, la ropa que se viste e incluso en el mundo de la perfumería. En este sentido, cuando se habla de perfumes de hombre y mujer, se hace referencia a diferentes tipos de olores que desde pequeños han ido asociados a un sexo determinado. Sin embargo, como cabe suponer, cada persona puede usar el perfume que más le guste y coincida con sus preferencias, independientemente del género al que esté asociado.
Los olores hablan mucho no solo de la persona que los porta, sino también de la cultura y de la sociedad en la que vive. Los diferentes perfumes se asocian a un género u otro por la educación recibida, y pueden variar de una localización a otra. En este artículo se van a enumerar algunas de las claves que nos da el perfume de Dossier sobre la diferencia entre los perfumes para mujer y hombre, siempre desde la perspectiva de la civilización occidental. No obstante, cabe recomendar que una mente abierta en cualquier sentido es importante, pues realmente lo que debe prevalecer es la elección del perfume que se identifique con cada persona, independientemente de su sexo.
Fragancias masculinas
Los perfumes masculinos o para hombre son aquellos en los que las notas de inicio apuestan por los olores frutales cítricos. En muchas ocasiones, también se incorporan notas verdes para darle mayor personalidad y distinción, como los toques que ofrecen el romero, la salvia o la albahaca.
En las notas medias, en el caso de los perfumes de occidente, el uso de las flores está muy restringido para el hombre. No obstante, se suele usar mucho el geranio porque presenta unas características muy particulares. Sin embargo, la gran mayoría opta por una apuesta segura, que no es otra que unas notas medias dirigidas a las especias, como son el cardamomo, el anís, el jengibre o la pimienta, que son las más empleadas en las formulaciones para perfumes masculinos. En cualquier caso, las notas medias para hombre son más intensas, ya que el olor amaderado, a roble, a cedro o a cuero, entre otros, están muy presentes.
Como curiosidad y en relación a las notas florales, mientras que en occidente la rosa queda prácticamente reservada para los perfumes femeninos, en oriente se relaciona con las fragancias para hombre. En este tipo de ejemplos se puede observar perfectamente que los aromas no tienen género, salvo el que les asocia cada cultura y momento histórico.
Para finalizar con esta breve descripción, en cuanto a las notas finales, sí que coinciden mucho los perfumes masculinos y femeninos, en ambos casos suelen tener presencia de ámbar y almizcle, entre otros.
Fragancias femeninas
En relación a los perfumes para mujer, la extensa mayoría cuenta con notas de salida afrutadas. Se trata de una regla no escrita, pero que se suele cumplir, siendo las notas dulzonas y cítricas las grandes protagonistas de los perfumes femeninos. Asimismo, es habitual contar con una mayor presencia floral en las notas medias que los perfumes para hombres, una característica que les ofrece un olor distintivo que se asocia al sexo femenino y que permite etiquetarlo como dirigido claramente a este género.
Por último, y como se ha indicado en el apartado anterior, tanto los perfumes de hombre como los de mujer suelen tener presencia de ámbar y almizcle, fundamentalmente.
¿Qué son los perfumes unisex?
En un último grupo se engloban los que se denominan fragancias unisex como los que se presentan en la selección de perfume de Dossier, la tienda especializada en fragancias de lujo, y que son aquellos que el fabricante elabora pensando en ambos sexos y son utilizados indistintamente por hombres y mujeres. Cabe incidir de nuevo, en este sentido, que todo depende de las creencias de cada persona o cultura, pues cualquier perfume puede ser utilizado tanto por un género como por otro, ya que los aromas al final solo son percepciones olfativas. De este modo, un hombre puede usar sin problemas un perfume floral y fresco y una mujer optar por aromas intensos mientras se sientan cómodos e identificados con ellos.
Poco a poco, en el mercado se van a ir encontrando una mayor variedad de perfumes unisex, de manera que las parejas pueden utilizar el mismo, incluso toda la familia. Esta opción es muy conveniente, pues no son pocas las ocasiones en las que los núcleos familiares, se sientan a la misma mesa, o se meten en el mismo vehículo, cada uno de los miembros perfumados con una fragancia diferente, y acaban con un tremendo dolor de cabeza por la incompatibilidad de estos.
Conclusión
Dejando de lado el marketing, la gran mayoría de perfumes podrían considerarse como perfumes unisex, no obstante, la cultura y la publicidad influyen de manera que un olor rápidamente se relacione con un determinado género.