Perú.- El Congreso de Perú destituyó este viernes a la presidenta Dina Boluarte en una histórica votación exprés, marcando otro episodio de inestabilidad política en el país andino. Boluarte, quien asumió la presidencia tras la crisis política de 2022, dejó el cargo en medio de rumores sobre un posible asilo en embajadas extranjeras, aunque su abogado confirmó que permanecerá en Perú.
La exmandataria enfrenta al menos 11 investigaciones de la Fiscalía por graves delitos, entre ellos corrupción, lavado de dinero y violaciones a derechos humanos. Entre las imputaciones más graves está la muerte de más de 50 manifestantes durante protestas que exigían elecciones anticipadas, además de supuestas irregularidades relacionadas con regalos no declarados y encubrimiento político.
El proceso de destitución contó con el respaldo de la mayoría de partidos de derecha del Congreso, quienes voltearon contra Boluarte. Entre ellos figuran líderes con ambiciones presidenciales, como Keiko Fujimori y Rafael López Aliaga. Estas maniobras políticas reflejan un fuerte movimiento por parte de las fuerzas parlamentarias hacia un cambio en el liderazgo del país.
En su lugar asumió de forma interina José Jerí, presidente del Congreso y miembro del partido derechista Somos Perú. Jerí se convertirá en el séptimo presidente del país desde 2016 y gobernará hasta las elecciones ya convocadas para 2026, en un contexto de alta incertidumbre política y social.