Ucrania. – Es posible que recuerdes que el 26 de abril de 1986 en Chernóbil, Ucrania, ocurrió una catástrofe nuclear considerado el peor accidente nuclear de la historia. La explosión fue durante una prueba de seguridad que se estuvo llevando a cabo en la recámara de control, fallas en tuberías provocaron el escape de gases altamente radiactivos.
Se tuvo registro de la muerte inmediata de 54 personas y el pueblo completo de Prípiat, donde se encontraba la planta, tuvo que ser evacuado de emergencia. Ahora después de más de 30 años, podrás entrar a ver los restos de la recámara de operaciones, que anteriormente se le consideraba zona altamente radiactiva.
Este año, el gobierno de Ucrania decidió que se abrirán las puertas de la sala de control número 4 de la planta nuclear de Chernóbil. La intención es que los turistas puedan observar su interior por unos cuantos minutos. El presidente de Ucrania Volodímir Zelenski declaró que “Chernóbil ha sido una parte negativa de Ucrania que se marcó en la historia después de mucho tiempo y ahora ha llegado el momento de cambiar esa percepción. Crearemos un corredor turístico que muestre el renacimiento de la naturaleza luego de un desastre hecho por humanos”
La nueva atracción incluirá recorridos guiados, una mejor señal para celulares y hasta la posibilidad de grabar en lugares donde antes se mantenía prohibido ingresar cámaras. La antigua recámara de control de la planta nuclear, es el histórico sitio donde los ingenieros apagaron las bombas de enfriamiento que después provocaron el histórico desastre. Es importante mencionar que para acceder es necesario portar un traje especial y que vayas por medio de una agencia especial que organice las visitas.
La recamara de control ha sido modificada desde 1986, por lo que seguirá teniendo los mismos controles de comando, así como los monitores originales desde su construcción. Aunque la liberación de aire radiactivo se controló en su momento, todavía se encuentran cerca de 200 toneladas de combustible radiactivo entre sus ruinas. Por esta razón, después del recorrido, sin excepción los turistas deberán realizarse dos exámenes de radiología para descartar cualquier nivel superior al soportado. Hasta el momento el pueblo se sigue manteniendo abandonado debido a sus altos niveles de radiación.
Diversos medios indican que las reservaciones para entrar han aumentado un 40%, ya sea por la curiosidad o bien por el reciente estreno de la serie en HBO sobre el desastre de Chernóbil que al parecer ha tenido un gran éxito.