Morelia, Michoacán.- Integrantes del Concejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM) denunciaron una mala condición de las carreteras sobre todo las que conducen a las diversas comunidades indígenas, donde realizan las festividades por la noche de muertos.
En rueda de prensa, el integrante del Consejo Administrativo de Jarácuaro, César Gabriel Capilla apuntó que no debería ser necesario hacer el llamado a la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) para que realizaran su trabajo de conservación de las vías públicas, sobre todo en esta época importante para los pueblos indígenas que realizar festividades por la Noche de Muertos.
En este marco el vocero del CSIM, Pavel Ullianov Guzmán Macario señaló que las autoridades no hacen participes a los concejos de las comunidades para la organización de las fiestas del 1 y 2 de noviembre.
Señaló que sólo se les distribuyen 40 mil pesos a Canadá comunidad para que realicen sus actividades.
En la conferencia donde dieron a conocer que en Jarácuaro se realiza el evento “La Animecha Kejtsïtakua: ofrenda a las ánimas entre los p’urhépecha”, mismo que incluye colocación de varias ofrendas y arcos florales para los cuales pidieron un total respeto, por lo que se pronunciaron en contra de la venta de bebidas embriagantes.
En su oportunidad, el coordinador del Consejo de Administración de Jarácuaro, José Armando Bartolo de Jesús comentó que los 40 mil pesos para realizar la festividad, no les alcanza, “sólo para el sonido y algunas instalaciones en total llevamls invertido más de 150 mil pesos”, manifestó.
Así también comentaron que además de la seguridad de las rondas comunitarias el gobierno destinará un promedio de 800 elementos y 114 unidades de seguridad
Relataron que en Michoacán la tradición funeraria mantiene más de 3mil 500 años de existencia con las tumbas de ofrendas de la zona arqueológica El Opeño que son las más antiguas en el occidente de México su datación es del año 1500 a.e.c. “en tiempos más recientes antes del arribo español en el pueblo purépecha prehispánico existían al menos dos concepciones sobre el destino después de la muerte el cielo o Auanda y el inframundo o Uarhicho, en ambos casos la muerte es una prolongación de la vida sobre la tierra, posteriormente de la conjugación de los rituales mesoamericanos y judeocristianos surgió la síntesis de Ofrenda a las ánimas celebración de profunda significación ,es una ceremonia ritual mediante la cual se cumplen ciclos anuales se fortalecen los compromisos comunitarios y se convive de forma colectiva”, destacaron.