Bélgica. – Un equipo de científicos de la Universidad de Lieja, liderado por Clement Martin, está creando un compuesto que imita el olor de los huesos humanos secos para mejorar el entrenamiento de perros especializados en la búsqueda de restos humanos. Este avance, en colaboración con la policía federal de Bélgica, busca resolver casos sin resolver al permitir a los perros rastrear restos humanos en estados avanzados de descomposición.
El proyecto consiste en un “kit” que combina compuestos químicos presentes en la descomposición humana, ofreciendo una alternativa ética y práctica para entrenar a los perros, evitando el uso de restos reales. Los perros de rastreo de restos humanos, como “Bones”, requieren miles de horas de entrenamiento para detectar el “olor a muerte” y otros rastros.
El nuevo compuesto podría facilitar la localización de restos humanos secos, un desafío para los perros debido a que los huesos son porosos y absorben olores del entorno, lo que dificulta su detección, especialmente en casos antiguos. Con este avance, los investigadores esperan resolver casos que han permanecido sin respuesta por años o incluso décadas.