El año pasado tuvo un ligero momento de fama luego de que se conociera que era candidata a eurodiputada
Argentina.-“Nacida en Rosario. Politizada en Barcelona“, se define María Delfina Rossi en su perfil de Twitter. El año pasado tuvo un ligero momento de fama luego de que se conociera que era candidata a eurodiputada por el partido Izquierda Popular de España. Pero ahora vuelve a la Argentina para quedarse: el Gobierno acaba de designarla directora del Banco Nación.
El nombramiento de la hija del ministro de Defensa Agustín Rossi fue comunicado a través delDecreto 1625 publicado este miércoles en el Boletín Oficial. La decisión lleva las firmas del ministro de Economía, Axel Kicillof, y la presidente Cristina Kirchner.
La joven de 26 años tiene una licenciatura en Economía cursada en Barcelona y un master realizado en Florencia, Italia. En la actualidad, según cuenta ella misma en las redes sociales, se encuentra estudiando en la universidad norteamericana de Austin, Texas.
La ex candidata a eurodiputada compartirá la conducción del organismo con personas que, como mínimo, tienen 12 años más que ella. Quien la sigue en edad dentro del directorio es el propio presidente del Banco Nación, Juan Ignacio Forlón, quien con 38 años conduce una de las entidades bancarias más importantes del país.
Hasta el año pasado, Delfina se definía en su cuenta de Twitter como “feminista, ecologista y de izquierda“. Casualidad o no, la hija de Rossi sacó la descripción de su cuenta antes de asumir.
Su trayectoria europea
Delfina Rossi llegó a Cataluña junto a su madre en 2002. Sus primeras actividades políticas comenzaron al año siguiente, cuando participó en las marchas contra la guerra de Irak, conflicto bélico en el que España aportó tropas en respaldo de los EEUU.
Poco después se sumó a Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), un partido ecologista que forma parte del frente Izquierda Plural, constituido por unas 30 organizaciones. Rápidamente se convirtió en una referente y asesora de la agrupación.
Ya en 2014 fue candidata a eurodiputada de la alianza. Pero, debido a que integraba el puesto 37º de la lista, no consiguió llegar a una banca. “Siendo tan joven es un orgullo haber sido elegida. Lo mío es una candidatura de lucha, voy en representación de las juventudes verdes europeas y ya es un todo un símbolo”, evaluó en aquel entonces.
En un spot de campaña colgado en la web, Delfina aparece con una ancha y cálida sonrisa que no se ve opacada por sus severas palabras proselitistas. “Doy apoyo a la carta de derechos digitales WePromise para estas elecciones europeas. Primero, porque necesitamos más transparencia y que la gente participe. Es imposible seguir viviendo con leyes como las del Partido Popular que criminalizan las protestas y movilizaciones. Y en segundo lugar, porque necesitamos privacidad y democracia. Estamos en contra de los negocios de las grandes empresas corporativas”, plantea la candidata en el material audiovisual.