México. – Un estudio publicado en Scientific American revela que el cambio climático está provocando que los animales modifiquen su color natural debido al aumento de las temperaturas. Investigadores de todo el mundo señalan que, en climas más cálidos, los animales tienden a volverse más claros, mientras que en zonas más sombrías y húmedas, los colores oscuros prevalecen. Este fenómeno no solo afecta a los animales de sangre fría, como se había observado desde 1949, sino también a especies de sangre caliente, como las aves.
El análisis de más de 10,000 especies de aves ha confirmado que en zonas cálidas, las plumas de colores claros como el blanco y el amarillo son más comunes que los tonos oscuros. Sin embargo, factores como el aumento de las precipitaciones pueden provocar que algunas especies se oscurezcan, ya que la melanina, responsable de los colores oscuros, también ayuda a proteger a los animales de patógenos.
El Sol no decolora a los animales
Este fenómeno no es simplemente el resultado de la exposición al sol, ya que los pigmentos en la piel, pelaje o plumas no se degradan por la luz solar. Diversas especies, como caracoles en los Países Bajos, lagartos en Francia, y libélulas en América del Norte, están experimentando cambios en su coloración debido al cambio climático.
El impacto de estos cambios podría afectar la supervivencia de las especies, ya que los animales más claros pueden sobrecalentarse, mientras que un aumento en la humedad podría fomentar el crecimiento de bacterias perjudiciales. Los científicos siguen investigando cómo estos cambios podrían implicar también alteraciones genéticas en los animales.