Mundo. – El excampeón de los pesos pesados de UFC, Caín Velásquez, fue declarado culpable de intentar matar a Harry Goularte, el hombre acusado de abusar sexualmente de su hijo.
El juez Arthur Bocanegra le impuso una sentencia de cinco años de prisión, con la posibilidad de reducir el tiempo por buen comportamiento. La condena fue considerablemente menor que los 30 años que podría haber enfrentado, debido a las circunstancias del caso.
Velásquez había intentado vengarse de Goularte, lo que derivó en una persecución en la que una de las balas disparadas por el expeleador hirió a Paul Bender, padrastro de Goularte.
El exdeportista se había declarado “no culpable” en una audiencia el año anterior. A pesar de los graves cargos, el excampeón recibió apoyo de figuras dentro de la UFC, quienes comprendieron el motivo detrás de sus acciones.
Velásquez, quien pasó ocho meses en prisión preventiva antes de recibir libertad bajo fianza, expresó su arrepentimiento por el intento de homicidio. Ahora, enfrenta una pena que será reducida por el tiempo ya cumplido en prisión.