Estados Unidos. – El Departamento de Justicia de EE.UU. presentó este martes cargos federales contra Decarlos Brown Jr., acusado de asesinar a Iryna Zarutska, una refugiada ucraniana de 23 años, en un tren cerca de Charlotte, Carolina del Norte, el mes pasado. El ataque, aparentemente aleatorio, fue captado en video y ha reavivado el debate sobre la violencia en el transporte público, la salud mental y la reincidencia criminal.
Brown, quien tiene un extenso historial delictivo con 14 casos previos y un diagnóstico de esquizofrenia, ya enfrentaba un cargo estatal de asesinato en primer grado. Ahora, la acusación federal por causar la muerte en un sistema de transporte masivo podría derivar en cadena perpetua o pena de muerte.
La víctima había llegado a EE.UU. huyendo de la guerra en Ucrania y, según su familia, buscaba construir una vida más segura.
La secretaria de Justicia, Pam Bondi, afirmó que el caso es consecuencia de “políticas fallidas de indulgencia con el crimen” y aseguró que el gobierno buscará la máxima pena contra el acusado.
Aunque Carolina del Norte contempla la pena de muerte, el estado no ha realizado ejecuciones desde 2006 debido a disputas legales sobre el procedimiento de inyección letal.