España.- Un hombre fue juzgado este miércoles, acusado de bañar a su hijo de cinco meses en agua hirviendo provocándole quemaduras de segundo y tercer grado en el 70% de su cuerpo.
El padre del menor podría pasar al menos 12 años en la cárcel, si es que el juez lo encuentra culpable del delito de lesiones por deformidad.
Los hechos ocurrieron en 2012, cuando el procesado, en compañía de su pareja y de su hijo de cinco meses y 18 días, acudió a casa de su hermana a pasar la tarde, pero cuando se quedó solo, con el menor, decidió bañar al bebé. Para ello, utilizó “agua hirviendo a altísimas temperaturas” que vertió sobre el cuerpo de su hijo.
El fiscal argumenta que aunque el bebé empezó a llorar de forma inmediata, el acusado “sujetándolo por la cabeza”, “lo mantuvo en contacto con dicho líquido mientras el bebé seguía llorando hasta que finalmente lo extrajo, cubriéndole a continuación con una especie de trapo y secándole con él mientras se le desprendía la piel”.
Fue en ese mismo momento cuando llegó la madre del bebé y la hermana del acusado que lo llevaron al hospital donde quedó ingresado en la UCI y desde donde fue trasladado a la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío, de Sevilla donde tuvo que ser ingresado en la UCI pediátrica “dada la gravedad y magnitud de las heridas”.
El pequeño tardó en recuperarce 296 días y tuvo que ser sometido a varias intervenciones quirúrgicas para colocación de injertos cutáneos.
El Ministerio Público lo considera culpable de un delito de lesiones por deformidad con el agravante de parentesco por el que, además de los 12 años de cárcel, reclama por encima de la pena de prisión solicitada, otros 15 años de prohibición de acercamiento y comunicación con su hijo, así como la privación de la patria potestad. Además, Fiscalía pide que el procesado indemnice al representante legal de su hijo en la cantidad de 180.000 euros.
Fuente: Antena Tres